Se cumple un año de la caída de Credit Suisse, ¿fue un regalo para UBS? Te lo contamos, junto a otras consecuencias de la quiebra del banco suizo, en el siguiente podcast:

La caída de Credit Suisse, un regalo para UBS

Se cumple un año de la caída de Credit Suisse y su compra por parte de UBS. Analizamos cómo fue y sus consecuencias.

En febrero, la entidad publicaba pérdidas de 7.300 millones de francos suizos, la mayor cantidad desde la crisis de 2008.

El 14 de marzo, tras el colapso de Silicon Valley Bank y el resto de quiebras de bancos estadounidenses, Credit Suisse publicaba un informe en el que reconocía que había "debilidades materiales" en los controles sobre la información financiera.

El banco se desplomaba y el precio de mercado de los bonos no garantizados del banco con vencimiento en 2027 tocaba mínimos. El regulador suizo, tomaba la decisión de no salvar a los bonistas de alto riesgo de la entidad.

Finalmente, el 19 de marzo, UBS llegaba a un acuerdo para comprar el banco por 3.200 millones de dólares, un 60 % por debajo de su valor en bolsa.

Entre las consecuencias, destacan dos: el desplome y posterior recuperación de los CoCos y el comportamiento que ha tenido después UBS.

La emisión de CoCos surgía durante la crisis financiera de 2008, con el objetivo de reforzar los balances de los bancos europeos y elevar el capital de solvencia para cumplir con los requisitos de capital de Basilea III.

El colapso del banco supuso un duro golpe para los CoCos, por la decisión de las autoridades suizas de dejar a cero el valor de los bonos contingentes convertibles de la entidad, por más de 16.000 millones de euros.

Los titulares de estos bonos perdían toda su inversión frente a los 3.000 millones de euros que iban a recibir los accionistas.

Un regalo para UBS

Y la segunda consecuencia es para UBS, el banco que se quedó con la entidad suiza y que ahora es el segundo banco europeo. En el último año, UBS ha subido en bolsa un 60%.

Además, la integración todavía no se ha completado: la marca Credit Suisse va a desparecer de forma definitiva en 2025 y la integración completa se podría prolongar hasta 2027.

Eso sí, el Banco Nacional Suizo ha expresado la necesidad de revisar si los requisitos de capital exigidos a UBS, por su condición de entidad de importancia sistémica, son suficiente.

Pero pese a las posibles preocupaciones, la mayoría de expertos coincide en señalar que UBS ha sido el gran beneficiado de la caída de Credit Suisse.