Adquirir los derechos deportivos de una gran competición ha dejado de ser sinónimo de negocio. Poder retransmitir La NFL, la NBA o la MLB cada vez es más caro, lo cual implica que las tarifas de las plataformas se incrementan y el público con menos poder adquisitivo no puede permitirse disfrutar de su deporte favorito. La audiencia, por lo tanto se desentiende y la pasión se va erosionando hasta desaparecer. Un problema acuciante que hace difícil que lograr adquirir unos derechos de explotación deportivos tenga la rentabilidad de la que gozaba antaño.

Para solucionar el problema, Fox, Warner y Disney se unen para lanzar una plataforma de streaming de deportes que aglutinará todos los contenidos deportivos que tienen en sus carteras los tres grandes grupos, entre los que figuran las grandes ligas profesionales de baloncesto, fútbol americano y béisbol y se sumarán los mayores circuitos de golf, tenis, automovilismo y el mundial de fútbol de México, Canadá y Estados Unidos de 2026.

Disney, Warner y Fox reinventan las retransmisiones en streaming

Las tres grandes productoras se unirán para crear una plataforma que integre todos los productos deportivos que tienen en cartera.

Hasta el momento no ha trascendido demasiada información. Sí es cierto que se lanzará a finales de 2024. Se conoce también que se gestionará de forma independiente, con su propia marca, gestores y licencias en exclusiva. Además cada empresa estará representada en el consejo de administración de forma equitativa.

Futuras fusiones: Warner-Paramount

Más allá de las retransmisiones deportivas, parece evidente que la oferta actual de plataformas en streaming es insostenible en el medio plazo. Por eso Parrot Analytics ofrece hasta varias opciones de fusión. La mayor demanda en términos de gente se crearía con el binomio Warner Bross y Paramount. Tendrían bajo control el 29% de la demanda de series en Estados Unidos.

Las conversaciones entre ambas se iniciaron ya en 2023 y los analistas señalas que, de consumarse el acuerdo, ambas entidades estarían en disposición de competir contra Netflix y Disney, que hasta el momento dominan la industria del entretenimiento en streaming.