El banco alemán, a través de un comunicado, ha tratado de calmar a los inversiones tras la fuerte caída de ayer que fue de un 10% hasta 13,74 euros, su nivel más bajo desde 1984.
Asegura que dispone de alrededor de 1.000 millones para pagar los intereses de sus bonos ATM1, también conocidos como CoCos (bonos contingentes convertibles). Cifra que supera con claridad los 350 millones de euros en intereses a los que tiene que hacer frente en abril.
Además señala que dispondrá de 4.300 millones el año que viene, de los que 1.600 provendrían de la venta de su participación de casi el 20% en el banco chino Hua Xia Bank. El banco germano también dic que cuenta con unas reservas de alrededor de 1.900 millones para compensar las posibles pérdidas en el futuro.
Ayer se dispararon las alertas cuando los CDS del Deutsche Bank, los seguros que los acreedores compran para cubrirse del riesgo de impago, tocaron máximos desde 2011.
En las últimas sesiones, los bonos convertibles (CoCos) acaparan la atención de los analistas. Estos activos están bajo presión a medida que los valores financieros siguen cayendo. Parte de la preocupación está ligada al pago de cupones, aunque algunos dicen que tiene más que ver con si la propia cotización fuerza a que los bonos sean convertidos en capital.
Los analistas de JP Morgan señalan que el mercado de CoCos descuenta hasta 3 años de retrasos en cupones y lo califica de “excepcionalmente pesimista y difícil de justificar”. Un gestor de fondos con sede en Londres, que cita Reuters, asegura que parte el movimiento del mercado “no tiene sentido” y culpa a la pobre liquidez del mercado de bonos.