El envejecimiento de la población es el fenómeno demográfico que sufren las primeras economías mundiales. La baja natalidad, nuestro ritmo de vida y la mejora de la sanidad han dado lugar a sociedades con pocos jóvenes y muchos mayores.Uno de los países que lo ejemplifica a la perfección es Japón. Si desde hace unas décadas ya podemos hablar de población envejecida nipon, ahora el país asiático ha vuelto a batir su récord: Tormenta demográfica en Japón: el envejecimiento en máximos.

El envejecimiento poblacional bate récord

Hoy ponemos el foco en cómo el envejecimiento mide la población está ganando terreno en las sociedades avanzadas. Mientras Japón acaba de batir un nuevo récord en mayores de 80 años, los números de España también son preocupantes.

Según sus últimos datos demográficos gubernamentales, a 15 de septiembre, el 10% de la población de japonesa supera ya los 80 años unos 12,6 millones de personas.Pero ahí no queda todo: casi el 30% de su población...unos 36,2 millones de residentes, tienen más de 65 años.

España no se queda atrás

Según datos del Instituto Nacional de Estadística, desde 1970 y hasta diciembre de 2022, se observan dos tendencias claras: el grupo comprendido entre los 0 y los 14 años se reduce año tras año y los mayores de 64 años cada vez son más.

Con una natalidad actual del 6,9%, si en 1970 el grupo de los más jóvenes representaba casi un 27,8% de la población...ahora solo el 13,6% de los españoles es menor de 14 años. El caso opuesto lo encontramos en los mayores de 64 años... si hace unos 50 años este grupo senior no llegaba a ser el 10% de la población, ahora estos senior son más del 20% de los españoles.

Y aunque el grueso de la población española está ubicada entre los 15 y los 64 años, más del 66%, el alto porcentaje de personas mayores preocupa, y mucho, a los expertos: la esperanza de vida de más de 83 años inclina la balanza en favor de los mayores.

Consecuencias del envejecimiento poblacional

Pero lejos de ser cifras estacionales, esta realidad demográfica, con baja natalidad y baja mortalidad y bajo crecimiento natural tiende a acentuarse.

Es la realidad cada vez más común y compartida por parte de los países desarrollados. Pero ¿qué consecuencias trae para las sociedades? Desde el Fondo Monetario Internacional ya alertan que, si no se toman medidas para garantizar el relevo generacional... tendremos que hacer frente a un número creciente de jubilados con una menor población activa para sostenerles....así como mayores costes de atención medica relacionados con una explosión de enfermedades propias de edades más avanzadas.