El mercado sigue sumido en un moderado optimismo, pero algunas voces alertan de que se avecina una fuerte caída del S&P 500 y que EEUU podría estar en el inicio de una recesión. Lo ha dicho Gary Shilling, quien ya predijo la crisis de 2008. En concreto, según el experto que vio venir la crisis inmobiliaria, puede caer hasta el 35%.

El S&P 500 puede caer un 35%, según el experto que predijo la crisis de 2008

El analista financiero y doctor en economía Gary Shilling alerta de que el S&P 500 puede registrar fuertes caídas y de que el optimismo en el mercado es injustificado.

El mercado lleva un 2023 en positivo, con alzas del entorno del 15% para el S&P 500. Pero para el analista financiero y doctor en economía Gary Shilling, el optimismo es irracional, y el índice puede caer un 35% en el corto plazo.

Según apunta el experto en su newsletter mensual, hay un tira y afloja entre los inversores optimistas, que esperan un aterrizaje suave, tan citado por parte de la Reserva Federal, y las actuaciones del propio organismo, que, pese a que cita mucho ese “soft landing”, se ha mostrado decidida a doblegar la inflación, haciendo todo lo que sea necesario.

Antes de continuar, hay que entender quién es Gary Shilling y por qué sus predicciones pueden dar algo de miedo. Pues bien, más de dos años antes de que estallara la burbuja inmobiliaria , Shilling advirtió que los préstamos de alto riesgo eran probablemente "el mayor problema financiero" para la futura economía estadounidense. En 2006, escribió un artículo titulado: "La burbuja inmobiliaria probablemente explotará” y en 2007 señaló que la vivienda "hundiría la economía".

Y lo cierto es que hay indicadores para prever que EEUU se encamina a una recesión. Hemos hablado largo y tendido de la inversión de la curva. En esta ocasión, el diferencial ha profundizado su inversión desde el inicio de 2023, hasta niveles que no se veían desde los 80. Esto, históricamente, termina en recesión, entre 9 y 25 meses después.

Pero lo cierto es que, en esta ocasión, la que ya se denomina como la recesión más anunciada de la historia no termina de llegar y ya hay expertos que dicen que, esta vez, la inversión de curva podría haber fallado en su predicción.

La historia también nos dice que el control de períodos de inflación termina, en un 80% de los casos, en recesión.

¿Qué nos dicen otros expertos?

Para Alberto Roldán, director de Metagestión, "nosotros no tenemos la capacidad de poder determinar cuál es el margen de caída del mercado americano, pero sí hay elementos que nos hacen estar cerca de esa idea".

En todo caso, lo que no tiene sentido para el experto es que el equity americano se haya revaluado en el año, haya subido, haya habido una expansión de múltiplos y, sin embargo, los tipos de interés reales y el coste del capital también aumenten, "eso es insostenible".

Esto apunta a que hay un riesgo importante, a corto plazo, de que se ajuste ese imbalance que estamos viviendo en el corto plazo y "creemos que la parte más débil es el equity".

Para Rafael Ojeda, de Fortage Funds, esas proyecciones tan negativas podrían cumplirse si se da una recesión profunda y prolongada; algo que no está en el horizonte, dado que los bancos centrales monitorizan muy de cerca la economía.

"Probablemente Estados Unidos pueda caer en una recesión técnica, pero perfectamente controlable porque ya tenemos que darnos cuenta que el Banco Central Europeo y la Reserva Federal han tomado ya buena cuenta de la economía y la manejan a su antojo. Por tanto, la economía no fluye libremente sino que ellos la tienen constantemente controlada"

¿Por qué Shilling habla de ese 35%?

Según ha explicado el analista, el aumento de las tasas de interés está recompensando a los compradores de bonos del Tesoro, pero encareciendo aún más, relativamente, las acciones que ya están cotizadas.

La Reserva Federal, dice Shilling, promovió la caída de los precios de las acciones en 2022, y la debilidad recesiva en las ventas y ganancias corporativas probablemente hará que el S&P 500 caiga alrededor de un 35% a partir de ahora para cumplir con su pronóstico de caída total del 40%, apunta Shilling.

El asesor ha pronosticado una caída del 40% desde el pico del mercado de valores de enero de 2022 desde el año pasado.

Pues bien, desde el punto de vista del análisis técnico, ¿qué niveles clave hay que vigilar en el índice? Según apunta Javier Lorenzo, gestor de GPM, el S&P 500, ahora mismo, está en un rango lateral.

"Hacer predicciones de que el mercado va a caer un 35%, pues, lógicamente se pueden hacer y puede pasar en cualquier momento. Pero ahora mismo tendrían que pasar muchas cosas para que eso se diese".

La primera zona de soporte se encuentra en torno a los 4.350-4.360. De perder esa zona, ya podríamos empezar a plantearnos buscar cortos, o tener mayor predisposición bajista.

También para Diego Morín, de IG, antes de llegar a ese nivel de caída, hay que vigilar otros niveles intermedios en el índice: "la situación del SP en el corto plazo, para el corto plazo o muy corto plazo no ha variado, sigue ahí muy cerca de los 4.500".

Habría que vigilar los 3.800 y 3.500 puntos, en mínimos de este año, y después también los mínimos de octubre del año pasado.

En todo caso, para quien quiera mantener la cautela, Shilling también da a los inversores algunos consejos, que pasan por:

  • Mantener el dólar estadounidense como refugio.
  • Fijarse en los Bonos del Tesoro a largo plazo.
  • Cuidado con las acciones especulativas, como SPAC o criptos que, según sus palabras, siguen fracasando.
  • Vender acciones de crecimiento a medida que la Reserva Federal aumenta las tasas de interés.
  • Vender acciones de constructoras, ya que las tasas hipotecarias continúan aumentando.
  • Evitar las áreas relacionadas o afectadas todavía con el COVID, especialmente China, con una economía debilitada después del bloqueo pandémico y el colapso del sector inmobiliario.
  • Evitar las acciones “defensivas”, como las de bienes de consumo básico, servicios públicos y atención médica, que caen en los mercados bajistas, aunque no tanto como las cíclicas y otras acciones.
  • Mantener efectivo adicional para evitar pérdidas en el mercado y prepararse para eventuales recuperaciones económicas y financieras.