La británica Rolls-Royce se hace con un 53,1% de la española ITP, que se encontraba en manos del grupo de ingeniería española Sener. La compañía británica especializada en la fabricación de motores de aviación, pagará un total de 720 millones de euros a Sener por la operación.

Con la compra, Rolls-Royce se hace con la propiedad total de ITP, firma que está considerada la 'joya industrial' del País Vasco, por la alta tecnología que utiliza en la producción de piezas para motores de aviación y por el desarrollo que ha tenido desde su fundación. ITP, una empresa dedicada al diseño y fabricación de motores de avión con sede en Bilbao, ha sido socia de Rolls-Royce en todos los programas de los motores Trent.

En un comunicado conjunto, las empresas han señalado que el acuerdo ofrece "flexibilidad para liquidar hasta la mitad" del pago en forma de acciones de la británica.

Se espera que el pago se liquide en dos años y que la operación se cierre a principios de 2017 cuando las autoridades de la competencia hayan dado su visto bueno definitivo y compradores y vendedores hayan aprobado las últimas auditorias.

El presidente de Sener, Jorge Sendagorta, ha señalado que fueron los promotores y fundadores de ITP en 1989 y que durante estos han apoyado a la compañía "con una estrategia de inversión a largo plazo centrada en el desarrollo de una tecnología de vanguardia y una calidad de producción inmejorables".

"En los 27 años transcurridos desde la creación de ITP, los dividendos obtenidos por Sener se han dedicado íntegramente a los sucesivos incrementos de nuestra participación en la compañía. Estamos muy orgullosos de los logros conseguidos por ITP pero nuestra tarea ha finalizado y ha llegado el momento en el que corresponde a Rolls-Royce construir el mejor de los futuros para ITP", ha indicado Sendagorta.

Por su parte, Warren East, consejero delegado de Rolls-Royce, ha anunciado que ITP ha sido durante muchos años para su compañía un socio de "confianza" al tiempo que ha trabajado para otros fabricantes de motores. Confía que la inversión reforzará sus capacidades aeroespaciales con "excelentes instalaciones productivas, servicios y productos, generando nuevas oportunidades de crecimiento rentable".

ITP tiene su sede en Bilbao y emplea a 3.000 personas en España, México, India, Malta, Estados Unidos y Reino Unido.