La aerolínea alemana Lufthansa ha anunciado la reducción en sus previsiones de beneficios para este 2019 y se deja un 11% en los primeros minutos de la sesión bursátil en el Viejo Continente. La compañía lo achaca a la competencia con compañías de bajo coste del sector en Europa.

Las perspectivas ya revisadas de EBIT se sitúan entre el 5,5% y el 6,5% (bajando desde el margen entre el 6,5% y el 8,5% anteriormente previsto). Esto se traduce en un EBIT antes de impuestos que oscila entre los 2.000 y 2.400 millones de euros (lejos de las previsiones entre 2.400 y 3.000 millones de euros).

"Los rendimientos en el mercado europeo de corta distancia, en particular en los mercados nacionales del grupo, Alemania y Austria, se ven afectados por un sobrecapacidad sostenida causada por los transportistas que están dispuestos a aceptar pérdidas significativas para ampliar su cuota de mercado", explica el informe publicado por la compañía aérea.

Otros factores que han influido en esta reducción son el exceso de capacidad y los altos costes del combustible ya que, pese a la reciente caída de los precios del petróleo crudo, la compañía estima un gasto mayor que el año anterior (más de 550 millones de euros).

Por otro lado, la aerolínea afirmó que hará una provisión por un riesgo fiscal de 340 millones de euros en sus cuentas del primer semestre de este año debido a una cuestión fiscal abierta en Alemania, originada entre los años 2001 y 2005.