Nissan ha comunicado al Gobierno oficialmente a primera hora de esta mañana el cierre de su planta de Barcelona, una decisión que el Ejecutivo "lamenta", ha informado el Ministerio de Industria, que ha propuesto a la presidencia de la firma crear un grupo de trabajo para buscar alternativas a la fábrica.
Este cierre supone el despido de al menos a 3.000 empleados directos pero, además, deja en el aire otros 20.000 puestos de trabajo indirectos.
La compañía justificó este recorte en la producción en la bajada de ventas, sin embargo, la dirección garantizó que Barcelona seguiría produciendo. Unas cifras que le han caído más de un 30% en comparación con el año anterior. "No es el final de Nissan en Barcelona", asegura en Información Capital Jordi Carmona de UGT-FICA Cataluña.
Entrevista con Jordi Carmona, UGT Fica
Los sindicatos acusaron a esta de "mentir" porque ese recorte desembocaría en una reducción de personal. "Esto no es fruto del coronavirus, viene de más atrás", detalla Agustín Martín de CCOO Industria.
Entrevista con Agustín Martín, secretario general de CCOO Industria
Desde el pasado día 4, los trabajadores de los centros de Nissan en Barcelona se mantienen en una huelga indefinida para exigir un plan industrial, que a día de hoy mantienen tras 23 días parados.
A las 10.00 de este jueves se han convocado nuevas protestas tras conocer la decisión de la compañía de cerrar la factoría de Barcelona, según ha podido saber Capital Radio.
1.000 millones de coste
El Gobierno advirtió a Nissan el pasado día 25 de mayo de que cerrar su planta de Barcelona "le costará más de mil millones de euros", aseguró Raül Blanco, secretario general de Industria y de la Pequeña y Mediana Empresa.
Una cifra superior a los 300 millones que requeriría garantizar su futuro, según el propio ejecutivo. Así como encontrarse con una actitud "nada pacífica" por parte de las administraciones implicadas.
Ahora, tras este cierre, Moncloa busca una nueva vida a la factoría de la compañía nipona en la Zona Franca de Barcelona. Fuentes del sector, el Ejecutivo de Sánchez está en conversaciones con varias marcas chinas que quieren desembarcar en Europa.
¿Qué pasa con Ávila y Cantabria?
Barcelona es uno de los tres centros operativos, hasta la fecha, de Nissan en España. Cien años de la historia de la automoción en España quedan enterrados tras la comunicación llegada desde Japón.
Queda por resolver la continuidad de los casi 1.000 empleados que operan en las factorías de Ávila y Cantabria. El centro castellanoleonés se reconvirtió en un centro de recambios para toda la Alianza en 2009.
Las fábricas catalanas actualmente solo tienen asignados tres modelos (eNV200, Nissan Navara y Renault Alaskan), habida cuenta de que el Mercedes Clase X dejará de producirse este mismo mes.
