Cada batalla cuenta en la guerra por intentar arañar cuota de mercado. Y Walmart quiere ganar la última, la de las entregas de comida fresca a domicilio. El gigante minorista ha anunciado que lanzará un servicio de suscripción de 98 dólares al año que dará acceso a un número ilimitado de entregas en el día. También se establece una suscripción mensual de 12,95 dólares.

El servicio estará disponible primero en 1.400 tiendas en todo EEUU, pero a finales de año se extenderá a 1.600 tiendas, más de la mitad de las del país. El pedido mínimo será de 30 dólares. En total, Walmart incluye en el servicio nada menos que 100.000 productos.

De esta manera, Walmart lanza su artillería para atraer clientes que compren por Internet. Y lo hace con un servicio de entrega con tarifa plana que recuerda mucho a Amazon Prime, de su compañía archirrival de Seattle, aunque unos 20 dólares más barato. Eso sí, con una importancia diferencia: Amazon incluye todo tipo de productos, no sólo los alimentos. Y con la suscripción a Prime Video y a Prime Music y muchos libros electrónicos gratuitos.

Competencia feroz

Pero al menos la gran empresa minorista estadounidense intenta poner toda la carne en el asador para imponerse en la guerra a Amazon y al resto de compañías del sector. Este mismo verano anunciaba el servicio InHome Delivery, para las personas que deseen que la entrega de comida se haga desde la tienda directamente hasta el frigorífico. Incluso si el cliente no está en casa. Lo pondrá en marcha este próximo otoño.

Funciona a través de un sistema de entrada inteligente en el domicilio combinado con cámaras para que el cliente pueda vigilar si la entrega se está realizando de forma adecuada. La idea de Walmart es hacer más fácil la compra online.

En los últimos años la guerra se ha recrudecido y las grandes empresas del sector se han lanzado a diseñar servicios atractivos y rompedores para seducir al cliente. La primera en golpear fue Amazon, que estrenó Prime Now en 2014, para entregas en apenas unas horas incluso sin coste.

Target presentó su alternativa de entrega en el día con su programa Shipt. Ofrece además un periodo de prueba de cuatro semanas para un servicio que tiene un coste de 99 dólares al año o 9,99 por pedido.