Esto no es una película de espionaje, aunque podría serlo. Y es que Boeing, la empresa aeronáutica y de defensa estadounidense,  está más cerca de vender su primer avión marítimo espía.

La compañía afirma que tiene cinco clientes potenciales interesados en su nuevo avión, el Maritime Surveillance Aircraft, un avión espía de largo alcance que sigue el modelo del jet privado Bombardier’s 605.

Robert Schoeffling, directivo de la división militar de Boeing, no ha dicho quiénes son estos clientes (son alto secreto), aunque sí ha señalado que están repartidos en las regiones de Asia-Pacífico, Oriente Medio y Europa. Tampoco ha especificado cuándo se realizará el primer pedido de este modelo, probablemente tenga lugar en el plazo de uno o dos años.

El Maritime Surveillance Aircraft comenzó a desarrollarse en 2011 y ya ha recibido la aprobación de entre 10 y 20 países para ser comercializado. Boeing lo dio a conocer el año pasado en el salón aeronáutico de Farnborough que se realiza en Inglaterra. Como dato interesante, este modelo cuenta con cinco sensores extraídos del P-8 Poseidon, el mayor avión espía de Boeing construido para la Marina de EEUU, India y Australia.