El Banco Sabadell está considerando trasladar algunos de sus principales ejecutivos de Cataluña a Madrid, en el caso de que el President de la Generalitat no retire sus planes de independencia antes del jueves a las 10 de la mañana como ha solicitado el gobierno central, según fuentes de la agencia Reuters. Como otros cientos de empresas catalanas, Sabadell, el quinto banco más grande de España, anunció a principios de mes el traslado de su sede social fuera de Cataluña. Su objetivo es evitar la incertidumbre legal debido al movimiento secesionista.


España es la quinta economía de Europa y una eventual ruptura de nuestro país dejaría a Cataluña fuera de la Unión Europea con lo que supone en términos de protección al consumidor, esto ha sido fuente de temor para muchos depositantes y empresas.


Según fuentes de Reuters, el consejo de Sabadell consideraría en una reunión prevista para el 26 de octubre trasladar la oficina del presidente y varias direcciones generales a Madrid.


La reunión del consejo se realizará por primera vez en Alicante a 500 kilómetros de la ciudad de Sabadell, donde se fundó la entidad en 1881. Además, la presentación de los resultados del banco catalán se realizará en Madrid por primera vez en su historia el próximo 27 de octubre.


El posible traslado de personal se limitaría solo a una pequeña porción de los 26.000 empleados del banco. Pero esta decisión sería un nuevo golpe para el gobierno catalán, que ha declarado que las empresas han realizado movimientos temporales que pronto se revertirán.


Caixabank, el tercer mayor banco del país también trasladó sus oficinas fuera de la región y, aunque no planea seguir a Sabadell por el momento, una fuente de la entidad ha declarado que seguían monitorizando estrechamente los acontecimientos políticos. El gigante bancario celebrará su próximo consejo de administración en Valencia el próximo 23 de octubre y también presentará allí sus cuentas trimestrales al día siguiente.


Caixabank, Sabadell y BBVA son los bancos más expuestos en términos de depositantes de Cataluña, concentrando alrededor de un tercio de las cuentas en la región y sus acciones han tenido un comportamiento peor que el de sus competidores nacionales y europeos en las últimas semanas.


La semana pasada, los bancos españoles aumentaron sustancialmente su demanda de liquidez al BCE en la subasta semanas de depósitos ante el temor relacionado con una hipotética separación de Cataluña de España