La consejera andaluza de Igualdad, Políticas Sociales y Conciliación, Rocío Ruiz (de Ciudadanos), ha reclamado "evidencias científicas" sobre la brecha salarial después de que Vox cuestionara su existencia.

La diferencia salarial de género o brecha salarial es esa diferencia de retribución entre géneros.

El INE, en sus datos globales, publica que el salario medio bruto de las mujeres se situó en 20.607,85 euros en 2017 al subir el 2,4 % respecto al año anterior, por encima del 1,8 % que se elevó el de los hombres, hasta 26.391,84 euros, lo que redujo la brecha de género al 21,9 %.

Según los datos de la encuesta anual de estructura salarial, que publica hoy el Instituto Nacional de Estadística (INE), el salario medio bruto total se situó en 23.646,5 euros, tras elevarse el 2,1 %.

La diferencia de salarios por sexo disminuye si se compara la ganancia por hora, de forma que las mujeres pasaron de ingresar un 21,9 % menos que los hombres, a percibir un 13,5 % menos.

¿Y qué pasa en el sector público?

Dentro del sector público parece lógico pensar que no exista la brecha salarial ajustada (pagar menos por el mismo puesto), pero puede darse la no ajustada, la que se crea porque las mujeres tienen menos oportunidades, techo de cristal, baja por maternidad, reducción de jornada, etc, todos esos elementos que pueden hacer que una mujer no tenga las mismas posibilidades para acceder a un puesto de más salario que los hombres.

El INE sí desglosa sus datos de la brecha por sectores. Si buscas en su página la brecha salarial dentro de la Administración Pública y Defensa, recoge datos de Eurostat al respecto. El último año del que tiene cifras es 2016 y el porcentaje de diferencia en el salario de hombres y mujeres es del 5,7%, en términos no ajustados a las características individuales.

Dentro de la administración pública, el 51,59% de los empleados son mujeres y el 48,41% son hombres.

UGT-A y CCOO explican que el propio informe de género del Presupuesto de la Junta de 2018 reconoce esa diferencia cuando "los funcionarios hombres cobraban un 12,1% más que sus compañeras mujeres en 2017", como sostiene UGT-A, mientras que CCOO-A ha cifrado ese desventaja en un 22,1% en servicios sociales y de un 30% en servicios personales, sectores en los cuales ha encuadrado el trabajo de la Administración Pública.

UGT-Andalucía ha reivindicado que elabora cada año un informe sobre brecha salarial y el último, publicado en febrero de 2019, ha revelado que la diferencia salarial entre hombres y mujeres en Andalucía es de 5.849,45 euros/año.

El Banco Mundial, la Comisión Europea, la OIT, el INE, organizaciones sindicales como CCOO, UGT y USO, la patronal CEOE y estudios académicos demuestran que existe esa brecha, pero varía en función de cómo se calcule.

Como ejemplo podemos tomar las empresas del Ibex35: 9 de cada 10 empresas del selectivo publican esta información pero persisten las dificultades en su cálculo y en el consenso de metodologías. Según el análisis de EY, el 41% de las compañías del índice ha tenido en cuenta solo la retribución fija en el cálculo de la brecha salarial, mientras que otro 41% incluyó la retribución fija y la variable anual. El 18% restante ha considerado también la retribución variable plurianual, además de la retribución fija y variable anual. En algunas empresas existe una diferencia de retribución de casi el 30%. Sólo un 22,8% de los miembros de Consejos de Administración de empresas del IBEX son mujeres.

Otro ejemplo: según el IRPF de España, las mujeres declaran un salario medio de 17.459 euros en su declaración de la renta, el 25% menos que el sueldo medio declarado por los varones, que es de 23.3870 euros. Los datos de la Agencia Tributaria empeoran los de la Comisión Europea, que sitúan la diferencia salarial entre hombres y mujeres en el 14%.

Dentro de los países de la OCDE, España no está del todo mal: la brecha es del 11,5% según la organización, cuando la media del bloque es del 15% y escala hasta el 20% en el caso de la Unión Europea.