Será a las 12 y media de la mañana. El Comisario Jonathan Hill presentará la Capital Markets Union que desarrollará y potenciará los canales de financiación de las Pymes en la Unión Europea (UE). Los business angel sólo aportaron 357 millones de euros en 2013 a nuevas aventuras empresariales. La Comisión Juncker quiere más.

Según la documentación a la que ha accedido Capital Radio, Bruselas lanzará un paquete de buenas prácticas para ofrecer incentivos fiscales a la inversión en Pymes y empresas de media capitalización. En el calendario se habla de 2017 para su puesta en marcha.

También para ese año debe haber una solución a los problemas regulatorios que dificultan el trading de las Pymes en los mercados. El objetivo es reducir los altos costes que supone lanzar una Oferta Pública de Acciones. Según Bruselas, el dinero externo que llega a estas empresas depende en un 75% del crédito bancario. Esto debe cambiar.

El camino es modernizar la Prospectus Directive, que establece las normas y requisitos para que una empresa realice una emisión de acciones. Hoy en día cuesta 100.000 euros como mínimo y eso impide que los pequeños empresarios coloquen capital en el mercado.

El documento visto por Capital Radio establece las medidas y el calendario para desarrollar en los próximos meses y años un nuevo sistema de financiación y crédito para la UE. No tan dependiente de los bancos, más próximo al modelo estadounidense.

Se reducirán los requisitos de capital para la exposición de los bancos a infraestructuras. También habrá una amplia revisión de la Solvency II, la regulación del sistema asegurador, para calibrar cómo pueden las grandes aseguradoras poner dinero en empresas. Sin embargo, falta una armonización fiscal del sector en toda Europa que permita inversiones transfronterizas.

Pero bajando al detalle vemos una ausencia, una figura clave para el desarrollo de las finanzas en las Pymes y las empresas de media capitalización en Estados Unidos. El financial guide externo que orienta a los propietarios de compañías en sus cuentas y gestión patrimonial. “El diablo está en el detalle”, como reconocía a Capital Radio en Bruselas un experto de la regulación financiera con más de 20 años de experiencia.