La CE prepara un plan de medidas para la transición energética, que podría presentar el día 30 de noviembre. Lo ha anunciado en rueda de prensa, el director general de energía de la CE, Gerassimos Thomas. Bruselas prepara cambios en ocho bloques entre los que se encuentran: nuevas directivas para las energías renovables y novedades en el mercado interior de la energía. El objetivo: aumentar la eficiencia energética para reducir las emisiones de CO2. Una realidad que preocupa también a las empresas.

En la misma rueda de prensa, el consejero delegado de Repsol, Josu Jon Imaz, propone establecer un precio común del carbón para que todos los actores compitan en igualdad de condiciones.“Tenemos que cumplir con el compromiso de reducir la temperatura de la tierra hasta los dos grados. Todos los sectores y todas las compañías tenemos que ser capaces de cumplir este objetivo de una manera eficiente y profesional y la única manera que se me ocurre es estableciendo un precio común para el carbón”, ha dicho.

Todo para afrontar un escenario futuro que según Imaz estará más interconectado y será más urbano. De hecho el 70% de la población estará viviendo en ciudades y el 50% del PIB global se centrará en Asia. Con respecto al precio del crudo, Imaz ha afirmado que el pico de demanda no se alcanzará hasta el año 2030 o 2040, según la velocidad del proceso.