Las cifras de los autónomos que siguen sin poder abrir o que siguen viendo que su actividad se ha hundido son preocupantes. La prórroga de la prestación por cese de actividad, que termina actualmente el 30 de septiembre, así como otras medidas, no pueden esperar. "El Estado no puede mirar hacia otro lado", señala Sebastián Reyna, profesor del Instituto para la Formación del Trabajo Autónomo.

Los autónomos no pueden esperar

Hablamos con Sebastián Reyna, profesor del Instituto para la Formación del Trabajo Autónomo, sobre las medidas que necesitan los trabajadores por cuenta propia para sobrevivir

Y es que los datos siguen siendo preocupantes, porque hasta 280.000 autónomos todavía no han podido reabrir o reanudar su actividad y hasta un millón todavía tiene un 60% menos de ingresos. A esto se suma la incertidumbre sobre cuándo y en qué términos se va prorrogar su prestación.

¿Qué piden los autónomos? El tema central es ver cómo se puede mantener la situación de cobertura de aquellos autónomos que no han conseguido recuperar su actividad, señala Reyna.

Esa prestación de cese de actividad, de la que antes se había hecho poco uso, (y que es como una especie de ERTE), ahora se ha utilizado por un elevado número de estos trabajadores autónomos. Pero eso se termina, así que ahora la principal preocupación es que esto se prorrogue, porque su vigencia finaliza el 30 de septiembre.

Dificultades para sobrevivir

Con la situación actual, las asociaciones de autónomos alertan de que muy pocos de estos trabajadores podrán sobrevivir. En todo caso, Reyna confía en que el Gobierno prolongará las ayudas, ya que este tipo de decisiones se suelen tomar a última hora.

“Espero que el Gobierno articule algún sistema para prorrogar estas prestaciones”, señala, pero habrá que ver en qué términos, si se mantiene para todos los autónomos o solo para determinados sectores.

A todo esto hay que sumarle que la situación sanitaria no mejora, la pandemia sigue ahí y vamos a tener peores datos en los próximos meses.

¿Hasta cuándo hay fondos para poder apoyar a todos los trabajadores que se están viendo afectados, tanto por cuenta propia como por cuenta ajena Sebastián Reyna apunta que va a depender en gran medida de la ayuda europea, en cómo se reparta.

En este sentido, explica que "hay que mantener como sea la actividad y eso requiere acciones inmediatas", dice que no es el momento de estar mirando el déficit, ya que hay que gastar para mantener la actividad económica, para mantener a la población. "Estamos hablando de medidas de coyuntura… el Estado no puede mirar hacia otro lado".

Rebaja de cuotas

Pero en todo caso hay que tener una perspectiva temporal. "No se puede subvencionar la falta de trabajo permanentemente". Según el experto, habrá que ir modificando aspectos y ver en qué sectores o para qué empresas se mantienen las ayudas.

Además Reyna apunta a que se pueden adoptar otras medidas, como una reducción de la cuota a la seguridad social. "El tema impositivo es importante, pero si la actividad baja se paga menos IVA. Pero la seguridad social es fija, una cuota que tienes que pagar con independencia de tu actividad".

Por eso explica que se debe buscar un sistema, un plan de recuperación o renovación del trabajo, para que los autónomos más débiles puedan volver a trabajar sin pagar una cuota demasiado elevada.