El Ejército de Zimbabue desmiente que hayan dado un golpe de estado en el país y asegura que el presidente Robert Mugabe está a salvo.
Aunque ha cargado contra el entorno de la Presidencia por causar sufrimiento en el país y anuncia que los llevarán ante la Justicia. En un mensaje televisado el general S. B. Moyo asegura que las fuerzas quieren pacificar una situación degenerada política y socialmente. Afirma que esperan volver pronto a la normalidad: "La situación en nuestro país se ha elevado a un nuevo nivel. En primer lugar queremos asegurar a la nación que su excelencia, presidente de la república de Zimbabue y comandante en jefe del Ejército, Robert Mugabe y su familia se encuentran en perfecto estado y que su seguridad está garantizada". Además pide al resto de fuerzas de seguridad que cooperen por el bien del país.

Los militares critican a Mugabe, de 93 años y que lleva en el poder desde 1987, por la purga de veteranos varios ex guerrilleros, entre ellos destacan la destitución la semana pasada del vicepresidente, Emmerson Mnangagwa. El jefe de las fuerzas de defensa, Constantine Chiwenga, advirtió ayer de que tomarían "medidas correctivas" si continuaba la purga de veteranos en el partido de Mugabe ya que eran los que ellos querían para sustituirle en el poder.

Por su parte el presidente apostaba por su mujer para la sucesión. Por eso mismo, fuentes del gobierno han informado de la detención del ministro de Finanzas, Ignatius Chombo, un miembro de 'G40', facción del partido gobernante liderada por la esposa de Mugabe, Grace, que es vista como su posible sucesora.

Ante la complicada situación, embajadas como las de Reino Unido y EEUU recomiendan a sus ciudadanos que permanezcan en sus casas
Según un comunicado de la legación diplomática estadounidense, la embajada tendrá un personal mínimo y estará cerrada al público. El comunicado añade que las manifestaciones que pretenden ser pacíficas pueden volverse violentas, por lo que alerta de que se tenga cuidado cerca de grandes protestas o manifestaciones.