La bolsa japonesa ha liderado las subidas en Asia encabezada por los bancos y las compañías de seguros. Lo ha hecho después que el banco central japonés haya cambiado el enfoque de su política monetaria. Entre los cambios, el BOJ presenta el control de la curva de tipos como pieza central de su política. Una decisión que se ha tomado por siete votos a favor y dos en contra. Además, elimina el rango de madurez para las compras de bonos del gobierno y abandona el objetivo de su base monetaria pero mantiene el ritmo de compra anual de 80 billones de yenes. Comprará bonos a 10 años con un rendimiento del 0%. Por otro lado, continuará su política de expansión cuantitativa hasta que la inflación esté en el 2%. Sin embargo, el BOJ mantiene el tipo de depósito sin cambios en el -0,1%. 

Estas decisiones se han reflejado en el mercado de deuda, la rentabilidad de los bonos japoneses a diez años ha tornado a tasas positivas por primera vez desde el mes de marzo y en el mercado de divisas el yen vuelve a la caídas. El interés de los bonos de referencia a diez años ha subido tras conocer la decisión, hasta un máximo del 0,005%. En el lado de las bajadas, los títulos de Mitsubishi caen un 0,81%, entre los principales exportadores, Nissan baja más de un 1% al igual que Sony.

Los mercados chinos han recogido estos cambios del BOJ de forma mixta. Hong Kong (+0,81%) y Shanghai (-0.04%). Destacar en este mercado una operación, la fusión de dos siderúrgicas chinas Baosteel y Wuhan Iron and Steel. Y también a China Postal Bank que quiere recaudar 7.400 millones de dólares en una OPV en la bolsa de Hong Kong, en la que será la mayor venta de acciones en China este año, según Bloomberg. Serán en total 12,1 millones de acciones. El banco con sede en Beijing  planea fijar el precio por título en 4,76 dólares. Bank of America, Goldman Sachs y Morgan Stanley serán los encargados de supervisar la oferta.

En el resto de plazas, el ASX 200 australiano ha sumado un 0,72% y el Kospi surcoreano ha negociado prácticamente plano.