El grupo francés de artículos de lujo LVMH ha llegado a un acuerdo definitivo para comprar la cadena de joyería estadounidense Tiffany & Co por 16.200 millones de dólares (14.700 millones de euros). Se trata de su mayor adquisición hasta la fecha y apuesta por volver a darle brillo a la emblemática joyería.

Las dos empresas han estado discutiendo su unión durante cinco semanas. LVMH hizo su primera aproximación ofreciendo 120 dólares por acción que finalmente ha tenido que elevar hasta los 135 dólares.

Ese precio representa una prima de un 7,5% respecto al precio de cierre de las acciones de Tiffany el viernes y es de un 50% sobre el precio de las acciones previo al interés del grupo francés.

Las acciones de LVMH han abierto este lunes, tras confirmarse la compra, con subidas de más de 1% y las de Tiffany, que cotiza en Francfurt además de en EEUU, suman un 6,6%.

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La adquisición de Tiffany ayudará a LVMH a impulsar su posición en joyería y relojería ahora de un tamaño reducido con sus marcas Bulgari y Tag Heuer. Las marcas de moda y accesorios, entre las que se encuentran Christian Dior, generan la mayor parte de los ingresos de la empresa francesa.

Además, con esta operación, aumentará más su presencia en el mercado estadounidense. Las compañías esperan cerrar la transacción a mediados del próximo año y la junta de la estadounidense recomienda a los accionistas que acepten la transacción. .

Se trata de la mayor adquisición llevada a cabo por el conglomerado francés, un récord que logró en 2017 con la compra de Christian Dior, por la que se desembolsaron 12.000 millones de dólares.

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La famosa joyería ha caído en manos francesas y se espera que esta adquisición impulse los resultados de la compañía americana.

Mercado chino

Tiffany cuenta con más de 300 tiendas en todo el mundo y casi la mitad de las ventas las realiza en Estados Unidos. La firma está haciendo frente a la dura competencia de rivales más jóvenes que han surgido en los últimos años como la danesa Pandora y Signet Jewelers.

Ahora tiene también que enfrentarse a la guerra comercial entre Estados Unidos y China y a los cambios en los patrones de gasto de los clientes ya que los compradores chinos se retiran de Estados Unidos y gastan más en su país.

El analista de Jefferies, Flavio Cereda, señala que LVMH puede aprovechar esto para lanzar un "ataque" en el mercado de millennials chino. Los consumidores chinos de entre 20 y 30 años están ayudando a impulsar el crecimiento de la industria de bienes de lujo.