La mesa “Colaboración público-privada” del especial Día Mundial de la Salud ha examinado las ineficiencias y aspectos a mejorar de nuestro Sistema Nacional de Salud. ¿Por qué deben complementarse la sanidad pública y la privada? Aquí puedes escuchar la hora completa de debate.

Especial Día De La Salud - “Colaboración público-privada”

Mesa de debate con Pilar González de Frutos, presidenta de UNESPA, Enrique Porres, Consejero Delegado de Grupo ASISA, Antonio Burgueño, exdirector general de Hospitales de la Comunidad de Madrid, Sebastián Sansó, Director Corporativo de Desarrollo y Gerente de Hospitales Universitarios San Roque en Maspalomas, Carlos Catalán, director asistencial del grupo Ribera, Antonio Solans, director general de hospitales Viamed Salud, Alfonso de la Lama-Noriega, secretario general de ASPE, y Marta Villanueva, directora general de la Fundación IDIS

Pilar González de Frutos, presidenta de UNESPA, recuerda que “las necesidades de salud de la sociedad son muy extensas y, por el contrario, los recursos disponibles son muy limitados”.

Por ello, según la experta, “la sanidad pública y la privada no deben ser rivales sino complementarias”.

Sin embargo, existe un gran problema. En la opinión de Antonio Solans, director general de hospitales Viamed Salud, “seguimos instalados en la falta de planificación y en la carga ideológica del debate”.

Precisamente, esa vinculación a la ideología hace aún más difícil que el debate se lleve a cabo de forma consistente.

Una prioridad: desideologizar el debate

De hecho, el consejero delegado del grupo ASISA, Enrique Porres, piensa que es necesario “desideologizar el debate entre sanidad y privada. La población cada vez demanda una mayor calidad asistencial y no somos un país rico. El debate no debe ser ideológico sino sobre la cobertura de las necesidades de la población de la forma más eficiente posible”.

Carlos Catalán, director asistencial del grupo Ribera, solicita que se le deje participar más a la sanidad privada, ya que también cuenta con “talento y energía”.

La directora general de la Fundación IDIS, Marta Villanueva también se mueve en la misma línea: “queremos sumar para salvar vidas, que es el objetivo de todos. Hay que construir un sistema que sea complementario para aumentar la eficiencia. La sanidad privada es complementaria, fiable y de calidad”.

Un modelo de sociedad en juego

El exdirector general de Hospitales de la Comunidad de Madrid, Antonio Burgueño, califica el momento actual como crítico, “nos estamos jugando un modelo de sociedad en el que los máximos exponentes son la salud, la tercera edad y las pensiones”.

Burgueño, además, pide que se aumente el gasto en salud por parte del Estado: “Desde el año 2012 no pasamos de 70.000 millones de euros en salud, estamos exhaustos. El gasto supone 1.300 euros por persona y año, mientras que en Europa la media por ciudadano supera los 2.000 euros”.

Aceleración de la digitalización, pero también de las listas de espera

La pandemia ha acelerado dos variables claves en el sistema de salud: la digitalización y las listas de espera.

Respecto a la primera, el director Corporativo de Desarrollo y Gerente de Hospitales Universitarios San Roque en Maspalomas, Sebastián Sansó, afirma que la digitalización ya estaba presente y que la COVID-19, lo único que ha hecho es acentuarla.

En cuanto a las listas de esperas, algunos expertos como el ya citado Antonio Solans o Alfonso de la Lama-Noriega, secretario general de ASPE, le piden transparencia a las instituciones, ya que aún no se cuentan con las cifras de las listas de espera a las que el Sistema Nacional de Salud tendrán que hacer frente cuando la pandemia llegue a su fin.

Los integrantes del sector coinciden en que la propia pandemia va a dejar secuelas en las personas que han sufrido la enfermedad, pero también en otras que padecen otras enfermedades y que no han recibido un seguimiento adecuado.

Por lo que el Sistema Nacional de Salud tendrá que asumir una demanda asistencial también muy importante en la era post-pandemia.