"En 2018 IAG mostró unos resultados muy sólidos y positivos, incrementando sus ingresos"

Antonio Castelo, de iBroker, analiza a IAG.

IAG ha cerrado la jornada en negativo, se ha dejado un 0,16%. La compañía es el segundo valor más bajista del selectivo en lo que va de año. A pesar de ello, en el mes de junio el tráfico de pasajeros aumentó el 6,1%, transportando a 11.273 pasajeros, frente a los 10.624 en el mismo mes de 2018, mientras que la cifra acumulada en lo que va de 2019 fue de 55.885 personas frente a las 52.731 del año anterior.

Para Antonio Castelo, de iBroker, la compañía tiene una gran calidad y un margen de crecimiento para los próximos años, pero el entorno actual en el que opera es muy difícil: el Brexit, el aumento del precio del combustible, o la evidente ralentización económica, “hacen que las dudas sean lo suficientemente elevadas como para plantearnos una opción de compra en estos momentos, por lo que lo más prudente sería mantenerse al margen del valor”, señala.

En las últimas semanas la aerolínea ha anunciado una reestructuración de su deuda que el mercado ha considerado como muy positiva. Ha recomprado 500 millones de euros en bonos convertibles que vencían en noviembre de 2020, y ha anunciado una emisión de 1.000 millones en bonos en dos tramos de 500 millones de euros. El primero vencerá el 4 de julio de 2023 y, el segundo tramo, el 4 de julio de 2027, con lo cual seguirá mejorando su estructura financiera.

Castelo concluye reconociendo que muchos informes financieros hablan bien de la compañía, a pesar de que ha incrementado sus beneficios de manera muy leve.